Terreno que se comporta como un lienzo en blanco esperando a ser pintado, esperando a ser intervenido. Es el papel quien busca al pincel, así como el terreno busca nuestra huella, nuestra Arquitectura.
Esperando a ser significado, es nuestro Deber responder a esta Tacita Demanda.
Demanda que denota nuestras mas personales intenciones a la hora de comprender la esencia de un sitio.
Esencia que puede ser traducida en un Tejido donde la perforación del terreno en conjunción con la Arquitectura genera un nuevo territorio, tan capaz de responder al paisaje pictórico propio de Mendoza, como de aportar un nuevo uso, tan espacial como funcional.
Lineas que se transforman en acequias por momentos, en Arquitectura por otros. Para así darle un trazo tan integrador como regulador de nuevos espacios, resignificando la manera de vivirlos, la manera de proyectarlos.
Maneras tan ricas, como diferentes de acuerdo al Autor. Donde Terreno y Arquitectura pueden fusionarse y convivir tan armoniosamente, generando así una mimesis entre lo artificial y lo natural. Una continuidad que llevada a su máxima expresión es capaz de replantear el carácter de un espacio, de un paisaje...
El carácter expresado a través del lenguaje, donde el plegado es el principal responsable de plegar terreno, Arquitectura, y Re-plegar limites; a tal punto que dejan de serlo. Transformándose así en un borde tan fluido como integrador de dos vitales elementos: Tierra y Agua, capaces de dar lugar a una Arquitectura de continua linealidad horizontal, muy atractiva en contraposición a la inmensidad montañosa mendocina.
Monday, July 13, 2009
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment