Unidades complementarias

Billordo-Billone.

Sobre la base de las primeras propuestas realizadas en el primer cuatrimestre, los trabajos de los alumnos siguen desarrollando y profundizando el par inicial, por un lado el tratamiento del espacio público como soporte y estructurador de la propuesta arquitectónica, y por otro lado la concreción del edificio, en este caso estación fluvial, ponderando y revalorizando el gen tectónico propuesto en el primer ejercicio. Este par de trabajo que por momentos se identifica como tal, no surge como la división de dos temas, sino que se desarrolla como una totalidad, donde ambas situaciones se explican las unas con las otras, así el espacio colectivo y público, se convierte en el contenedor, no solo del espacio físico donde se desarrolla el edificio, sino que continente del espacio vital, ese que posibilita, sustenta y organiza, lo que luego rematara en el interior de la estación . Esta comprensión de lo uno y lo otro, como entidades indivisibles a modo Escheriano, delimitan, dan forma y soporte a la estructura del plano, manifiesta como una unidad total.

Los trabajos de Nahuel y Sebastian, comenzaron a mostrar las consecuencias tectónicas de la analogía primitiva, esa que se relacionaba con los remolinos y curvas de ondas de agua, que según el avance o retiro sobre la caleta, genera estas instancias.

En el trabajo de Nahuel se comienza a divisar el entendimiento de esta relación, que muestra al edificio y tratamiento del espacio público como una sola imagen. De esta manera la geometría que forma la génesis de la estación es conceptualmente la misma que genera los espacios abiertos. Así los pliegues y zigzagueos conforman los espacios, que atrapan en sus quiebres las distintas instancias del programa, como dos barcos amarrados a la gran plaza de acceso, uno (el más chico), contiene los apoyos, y deja bordo del más grande las funciones de boleterías y sala de espera, para la toma de embarcaciones, y de esta manera generar entre ambos el gran hall.

En el trabajo de Sebastian este equilibrio entre la estación fluvial y espacio público está dado en los mismos términos, pero se reconoce otro carácter, está claro en las plantas la vitalidad que adquiere para ambos esta situación de llegada, como segunda instancia del recorrido, pero también como primera gran expansión de entrada. Lo que en planteo inicial eran marcas de densidad, ahora se convierten en estructura, cerramiento y volumen, la distinción de estos elementos también reconoce su grado de indivisibilidad.

Puede verse en los primeros cortes, como esta segunda instancia (primera antesala al edificio), se contiene con la elevación de dos volúmenes menores, que a manera de embudo direccionan hacia el interior del edificio y punto de partida de lanchas, el final de este recorrido terrenal.

La propuesta de Nahuel se direcciona con mucha potencia hacia el río, busca su destino con un volumen que expresa toda la fuerza de su devenir, materializa de esta manera la tercera instancia, esa que puede encontrar sus huellas y primeros indicios cerca de la prefectura y acceso al puerto

La correspondencia entre volumetría y corte son alentadoras .el trabajo sigue evolucionando sobre los ajustes , para encontrar un equilibrio entre la expresividad, la escala del programa, la del lugar y su relación con la medida del hombre, que en ambos casos sin renunciar a la tectonicidad planteada, no dejen de lado esta visión de la totalidad.

DA.