Podría decir que en mi propuesta tomaron partido criterios que la unifican pero sin perder el carácter “soberano” de cada uno. Me refiero a que, si bien lo urbano, lo público y lo privado se plasman en una propuesta arquitectónica a partir de su propia interrelación, cada instancia “trabaja” o es trabajada en los puntos críticos de la propuesta.
Uno de ellos es el encuentro del pasaje con un espacio nuevo, cuyo carácter principal es ser público, pero al mismo tiempo sin perder el grado de privacidad del pasaje...
Entonces vemos como la interrelación de lo ya existente condiciona nuestro pensar… semi publico? semi privado?
El punto crítico se transforma en un nudo, del cual despegan y al mismo tiempo convergen las líneas de tensión, generando movimientos de suelo, pozos, pasillos, patios.
El planteo en si es despegar, crecer, obturar la visión, recortar, separarse, volver a unirse, perderse en el cielo…
El crecimiento entendido como la progresión tectonica de las distintas instancias, con sus velocidades y ritmos fluctuantes, en donde queden expresados físicamente a partir de su resolución material.
La unidad en la propuesta, el hecho de que tanto la biblioteca como el edificio se entiendan como una sola, se lee en el diálogo existente a partir de la proximidad de ambos cuerpos, los cuales dialogan permanentemente, logrando correlato en lugares estratégicos, distanciándose en otros…
Queda mencionar que lo estrictamente publico (la avenida y la calle) terminan por evidenciar las escalas y los usos. El hecho de que la biblioteca parezca un edificio “enano” es a la vez metáfora y provocación.
Quizás atada a la idea de que los libros son la base del saber, no pude escapar a mi propia idealización de un edificio de carácter público, en el que más allá de su funcionalidad, su simbología no puede ser inferior a la de un edificio de viviendas...
Lautaro Lerner
No comments:
Post a Comment